domingo, 4 de mayo de 2014

Aprendemos a ser felices

Uno de los objetivos que todos buscamos en la vida –y para muchos es el primero- es la felicidad; es decir, ese estado de satisfacción espiritual y física que hace que, al final del día, uno pueda encontrase consigo mismo y decirse con sinceridad: estoy bien, contento y orgulloso con lo que soy… y soy feliz.
Para conseguir este estado de bienestar físico y espiritual hay dos elementos que señalamos en primer lugar: la familia y los amigos. Siempre hemos oído aquello de que “no somos islas” y desde nuestra más tierna infancia nos han dicho que vivimos y nos hacemos personas viviendo con otros, por eso no es de estañar que las relaciones familiares y sociales sean determinantes para ser felices.

Con independencia del momento y las circunstancias que nos toquen vivir, lo que para cada uno de nosotros es la felicidad es siempre algo muy personal y aquello que a uno le hace feliz, puede dejar indiferente o resultar hiriente para otros. No todos somos felices de la misma forma.
Aprendemos a ser felices y, en éste aprendizaje, la familia juega un papel muy importante: la educación que recibimos de nuestros padres –y, por consiguiente, la que damos a nuestros hijos– es clave para una vida adulta y saludable.
Educar en sentido etimológico quiere decir “dirigir”, “encaminar”, “conducir”, y hace referencia a la capacidad del educador para “desarrollar o perfeccionar las facultades intelectuales y morales del niño o del joven por medio de preceptos, ejercicios, ejemplos, etc.” para que alcance su máximo desarrollo espiritual, social y físico. Vallejo-Nájera cree que en este oficio de educar hay 5actitudes esenciales:
COMPRENDER: Conocer a los hijos, colocarse en su lugar, lo cual está lejos de secundar sus caprichos o dejarse tiranizar por sus demandas.
AMAR: Valorar, dar tiempo, omitir chantajes sentimentales, decirles “te quiero” con palabras y gestos, tratarles consideradamente. Es imprescindible que entiendan que se les valora como personas y que siempre estaremos a su lado.
PROTEGER: Poner límites, cuidarles y defenderles sin suplantarles o encerrarles. La protección se encamina hacia el desarrollo del sentido de la responsabilidad para que el niño experimente cómo se obra de un modo
consciente, libre y maduro.
ENSEÑAR: Edificar habilidades personales y cualidades morales para hacer del niño un ser humano confiable y responsable.
LIBERAR: Confiar, dar oportunidades sin condicionar el camino para abordarlas.
“Los retos educativos son más llevaderos y tienen más garantías de éxito a través de la pedagogía del amor, de los sentimientos nobles y las buenas maneras” (Alejandra Vallejo-Nájera).

Amor, sentimientos nobles, buenas maneras… propósitos que todos nos hemos hecho al menos una vez en la vida y que, metidos en el quehacer diario, se nos escapan. Entonces surge la pregunta: cuando estamos atrapados por las tareas de cada día y falta tiempo, tranquilidad y calma para disfrutar de cada instante ¿cómo hacemos para recuperar esas buenas maneras?
Necesitamos aprender a valorar justamente los acontecimientos de cada día. Según los expertos "el 95% del sufrimiento es inútil, lo creamos nosotros mismos" (María Jesús Álava en 'La inutilidad del sufrimiento'). La mayoría de las veces los problemas surgen de nuestra manera de enfrentarnos a ellos y no de los hechos en realidad: nosotros interpretamos, valoramos, juzgamos… y sentimos, gozamos o padecemos en función de nuestra interpretación de la realidad. En este sentido, hay que insistir una y otra vez que las emociones nos predisponen y que vivir la vida en clave positiva nos facilita ser felices.

Bernabé Tierno, psicólogo y escritor, señala 12 claves para programar la mente de forma positiva:
  1. Por mal que estén las cosas, NO HAY QUE PERDER JAMÁS EL BUEN HUMOR, porque de lo contrario te debilitarás física y psíquicamente.
  2. Tu felicidad, tu bienestar, TU ALEGRÍA DE VIVIR NO TE VIENE DE FUERA, no depende de los demás ni de las circunstancias especialmente. Tú puedes proporcionártela cada día.
  3. ¡Ahora! en este mismo instante, CAMBIA EL “CHIP”, LA ACTITUD Y LA RUTINA PESIMISTA. Centra tu mente en lo que tienes, no en lo que te falta.
  4. Vive el presente, el hoy, aquí y ahora de cada día y disfrútalo, sean cuales fueren las circunstancias. NO PIERDAS NI UN MINUTO EN LAMENTOS.
  5. TENER MÁS COSAS NO ES SER MÁS, ni te garantiza la felicidad.
  6. LA FELICIDAD AUTÉNTICA NECESITA DAR, contagiar, hacer el bien y hacer felices a los
  7. demás.
  8. VIVE COMO PIENSAS, en paz y buen entendimiento contigo mismo y con los demás.
  9. Haz un inventario de todas las cosas buenas que te ha deparado la vida hasta hoy y DEJA
  10. EN EL OLVIDO TODO LO NEGATIVO.
  11. Pónselo fácil a la felicidad y ella no te abandonará ni en los peores momentos. DECÁNTATE POR LOS HÁBITOS SALUDABLES y por el disfrute de lo que tienes y eres.
  12. ¡QUIÉRETE, VALÓRATE, GÚSTATE, PERDÓNATE, HAZTE HOMENAJES! Y procura que la felicidad que vives en cada momento no quede sólo en ti.
  13. NO DEJES DE CULTIVAR CADA DÍA tu mente con los mejores pensamientos y tu alma con los mejores sentimientos.
  14. Recuerda que LAS CRISIS FORMAN PARTE DE LA VIDA DEL HOMBRE. Lo inteligente y práctico es aceptarlas y transformarlas en una oportunidad extraordinaria para fortalecernos y enriquecernos.
A modo de resumen, te presentamos 10 recomendaciones que, según los expertos, ayudan a ser más feliz.
  1. La felicidad no es un estado, es una actitud ante la vida.
  2. Hay que proponerse ser felices.
  3. Creer en nosotros mismos.
  4. Aceptar las cosas tal y como nos vienen. Somos humanos y, por lo tanto, cometemos errores.
  5. Ver los problemas desde la distancia. Anteponer los pensamientos a los sentimientos.
  6. Desear lo que tenemos y disfrutar de ello.
  7. Hacer lo que nos gusta. Buscar actividades que nos diviertan y nos permitan disfrutar del tiempo libre.
  8. Adoptar una actitud optimista ante la vida.
  9. Cultivar el sentido del humor. Es fundamental saber reírse de uno mismo.
  10. Apoyarse en la familia. Hacer cosas por los que están a nuestro lado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario